viernes, 18 de noviembre de 2016

Parto en Quito, Ecuador (maternidad Isidro Ayora)

Ya nació mi bebé y por acá les dejo mi experiencia con el parto, en mi caso tanto mis controles prenatales como el nacimiento de mi hijo fueron en el Hospital Gineco Obtetrico Isidro Ayora (la maternidad).

Los controles fueron bastante minuciosos, cada mínima cosa implicaba exámenes de laboratorio, consultas extras y así la doctora que estuvo a cargo de mi prenatal fue un apoyo increíble. Algo que deben tener presente es que en la maternidad sólo se atienden embarazos de alto riesgo o embarazos adolescentes así que probablemente si van queriendo pedir turno las manden a otro lugar, ahí sólo se puede llegar con referencia. En mi caso tuve bajo peso en el embarazo por problemas con la insulina.

El viernes 21 de octubre fui a emergencias porque tenia las manos hinchadas y leves zumbidos en los oídos (señales de alerta de preeclampsia) y me hicieron una revisión super completa, después de varias horas sin mayores señales de riesgo me mandaron a casa. El martes 25 tuve mi consulta, debido a la visita a emergencia la doctora me mando a hacer un examen especial de proteína en la orina y quedé con cita para el 1ro de noviembre pero volví por emergencias antes de eso.

Cuando fui el sábado 29 de octubre a emergencias si pase un mal momento. Al llegar tenia un fuerte dolor de cabeza y mareos, de nuevo mi tensión estaba mal, ya tenia contracciones de práctica que colaboraban con la presión alta y cuando me atendió la enfermera me dijo que a la emergencia se iba a parir, no por dolores de cabeza y me mando a casa, pero estaba una doctora que conocía de los prenatales y le explique que estaba dando señales de preeclampsia, sobre los exámenes que me mandaron a hacer y ella le dijo a la enfermera que me tomara los signos para atenderme. Luego la doctora se quedo atendiendo a otra señora y me toco la revisión con otra que por lo visto no sabía que los más (+) en el resultado de laboratorio era positivo y me fui a casa sintiéndome aún mal.

Cuando fui el martes 1/11 a consulta la doctora que me veía se molesto al darse cuenta que ya el nivel de mi tensión era peligroso y me habían atendido mal el fin de semana, me envío a hospitalización y me indicó que si me trataban de mandar a casa hiciera que la llamaran.

La enfermera en lugar de subirme directo me llevo a emergencias en donde estaba la misma enfermera idiota que lo único que dijo fue: ahora si piensa parir. Y mi tensión alta y yo con ganas de matarla, luego me vio una doctora (la única de los 6 que me vieron entre una consulta y otra que mostró señales de xenofobia, pero ya al final conversando me ayudo y aceleró el proceso). De emergencias en vez de irme a hospitalización me subieron directo a la sala de parto.

Ya en sala de parto más doctores nuevos (eso si es un tema ahí, como los doctores se distribuyen por áreas salvo en prenatal nunca vez al mismo médico). Bueno, lo primero que hicieron después de revisarme fue colocarme el tratamiento para la preeclampsia, una sonda y esperar porque ya tenía contracciones marcadas. El asunto fue que no dilataba, comencé a vomitar, al bebé le bajo el ritmo cardíaco, rompí fuente, cero dilatación y me llevaron a quirófano.

La cesárea fue rápida, ya de eso van 2 semanas, mi bebé nació el 2 de noviembre, el corte de hecho es super suave, apenas me dejaron cicatriz, fueron increíblemente amables conmigo en ese momento, me ayudaron a calmarme porque cuando me dijeron que iba a quirófano porque el bebé estaba en riesgo me puse peor, incluso bromearon conmigo porque el 1ro era mi cumpleaños y al niño lo sacaron a las 12:02 del 2 y me dijeron que podían hacerse los locos y colocar que había nacido el 1ro a las 11:59.

Lo siguiente fue la hospitalización. Mejores momentos que otros. Me terminaron el tratamiento el miércoles 2 y durante ese día no pude ver nunca a mi bebé (sólo me lo habían acercado después de la cesárea unos minutos pero yo estaba super cedada). El jueves me levantaron, literal me sacaron de la cama a las 5am y me dijeron, bañese y cambie sábanas (luego me di cuenta que eso era todos los días). No valía cesárea, dolor, nada. Era levantarse y hacer. Luego todavía estaba hiper adolorida y llego la asesora de maternidad y me dijo que a las 8 llevaba a mi bebé. Fue, me lo dejo en la camilla y se fue. Y así olvide todo dolor y comencé a cuidar a mi bebé, lo tuve siempre conmigo en la camilla hasta que salí el sábado 5. Si quería ir al baño o comer pues tenía que mantenerlo a él dormido. Estaba en la sala con 20 ó 30 mamás más pero cada una en lo suyo.

Lo que me parecía más pesado del tiempo hospitalizada fue que cada 12hrs cambiaban los médicos y nunca en los días que estuve me toco el mismo doctor. Era un tema repetir y repetir la historia y volver a responder las preguntas, la parte buena de eso es que tuve diversas opiniones y consejos. Odie con todo mi ser a las fulanas asesoras de maternidad (también cambiaban de turno a cada rato y me tocó lidiar con muchas) ellas iban cada 4hrs, cambiaban pañales, les curaban el ombligo a los bebés, los envolvían como tamales y a los que necesitaban les daban fórmula. Yo desde el primer momento me pegué a mi hijo y él arrancó a lactar sin problema, pero como por las prisas me paso como con 2 asesoras que le querían meter tetero a juro porque al yo tenerlo en el pecho les hacia lento el trabajo. Hubo otra que me lastimó el pezón, me dejo un morado insistiendo en que no tenia suficiente leche. Pero aunque todas las auxiliares y enfermeras cuando cambian turno hablaban mal de mi en mi cara que no me dejaba ayudar con las asesoras no les preste mayor atención y hasta ahora mantengo lactancia sin problema y estoy yendo incluso a donar leche en la maternidad.

Con respecto a eso de las asesoras siento que es en gran medida el tema cultural, lo que más me criticaban era darle mucha atención y cariño al bebé. Aquí los envuelven y para la espalda. Incluso entre las mismas mamás les parecía raro lo mucho que le hablaba a mi hijo. Son costumbres.

Todos los doctores de esa área fueron super atentos. Ahí de nuevo una atención impecable. Aún sigo en control en la maternidad y todo super bien. Creo que la falla allí es la emergencia y las enfermeras y auxiliares que no entiendo si me tocaban todas las amargadas de casualidad o siempre son así.

Espero que les sirva de algo la experiencia para darse una idea de la atención de los partos en Ecuador.

domingo, 25 de septiembre de 2016

Hora de rendirse

El hecho de emigrar a todos nos afecta de manera distinta, pero hay un punto en el que lamentablemente se puede caer cuando todo se torna difícil: ¡quiero rendirme! ¡quiero volver! y la peor afirmación: No tengo cómo hacerlo (económicamente hablando, porque costos de pasajes y viajes tampoco son fáciles de manejar).

Ya siendo lo anterior mencionado bastante duro se vuelve terriblemente peor si estas en familia y con niños, la prioridad como padres debe ser mantener a sus pequeños alejados del estrés de las cuentas que apenas cierran a final de mes, de ver los ahorros terminarse poco a poco, esa gran resposabilidad de no desmoronarse porque hay otro ser que depende úicamente de ti. Lo sé, es complicado.

Siempre deberíamos tener varios planes, pero no es sencillo porque todo, hasta la mínima cosa que desees hacer implica un gasto y su consecuente riesgo. Por básica que parezca la afirmación, se debe pensar muy bien antes de emigrar y no caer en la desesperación.Prever siempre en función del peor escenario posible. Si ya cometiste los errores, o mejor dicho, las acciones que te dejaron fuera de tu país y con tu hijo en medio de eso, sólo queda esforzarse para hacerlo lo mejor posible y que ellos no sufran en ningún momento.

No se trata de ser optimista o pesimista, debemos simplemente ser realistas con respecto a la situación que enfrentamos y ver qué se puede hacer con lo que tenemos, siempre buscando opciones, porque la hora de rendirse no existe. Jamás es sencillo, nunca olviden eso a la hora de partir.


domingo, 10 de julio de 2016

Salud Pública en Ecuador - visión 1

Estas líneas las escribo desde mi experiencia. La acotación "visión 1" es porque espero que se animen a enviar sus experiencias para poder ver cómo les ha ido a otras y poder aconsejarnos.

En mi caso, migre a Ecuador en noviembre de 2015, en marzo de 2016 supe que estaba esperando a mi primer hijo, no fue un embarazo planificado por lo cual quería comenzar mi control lo más pronto posible debido a que tengo hiperinsulinismo diagnosticado desde los 17 años y actualmente tengo 26.

Aunque trabajaba, no era algo formal por lo que no estoy afiliada al IESS (Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social) así que me contacté a través del 171 al sistema dependiente del Ministerio de Salud. Cuando te comunicas al 171 te piden tu número de cédula, sin embargo, hay una última opción en la que te comunican con un operador si no posees cédula ecuatoriana. Yo le expliqué a la señorita que me atendió que me había realizado una prueba de sangre que dio positiva y quería una cita para control con un obstetra.

Luego de dar los datos básicos (personales y de zona de residencia) me asignaron mi primer control para la semana siguiente en el Sub Centro más cercano a mi domicilio.

En mi primera cita me entregaron mi carnet de maternidad, que debo tener para todas mis consultas, e hicieron un perfil básico. Las consultas en los Sub Centros de salud no incluyen ecos. Después de explicarle a la doctora mis antecedentes familiares y enfermedades existentes me mando a hacer todos los exámenes de laboratorio correspondientes (a mi me tocó hacérmelos en el Hospital Pablo Arturo Suárez porque los Sub Centros no tienen laboratorio) y también me dio una orden para ir a un Centro de Salud más grande para realizarme un ecografía (este si un poco más cerca de donde vivía).

En mi segunda consulta a pesar de estar mis exámenes de laboratorio normales había perdido 5,8kg. Mi azúcar no estaba muy alta, pero para mi estándar normal (traje exámenes de laboratorio de mis controles con el endocrino de 2013 para acá) estaban ligeramente altos. Debido a mi hiperinsulinismo tengo más de 8 años medicada, como este medicamento no esta contraindicado en el embarazo nunca deje de tomarlo. Pase del consultorio de la obtetriz al de medicina interna en el cual decidieron que como podía existir un riesgo en mi embarazo un Sub Centro de Salud no estaba capacitado para atenderme. Así me enviaron al Centro de Salud más cercano que era al que ya había ido a hacerme el eco.

Como nota aparte quiero acotar que no llego a un punto de creer que los médicos ecuatorianos sean inferiores, pero si tienen ciertas deficiencias en el sentido de que están atrasados con algunas cosas. En particular batalle mucho porque incluso a la hora de revisar en sistema para colocar el motivo de mi traslado mi síndrome (el hiperinsulismo es un síndrome metabólico y no una enfermedad) no existe en su base de datos, lo que note después de ser atendida por 4 médicos diferentes es que para ellos insulina es igual a diabetes y en mi caso siempre me he cuidado para no desarrollar diabetes y mi problema no es que me falte insulina, es que me sobra. El asunto es que como tengo muchos años medicada y me hacia exámenes regularmente sé todo lo que necesito saber de mi cuerpo y de mi condición por lo cual fui muy exigente con los médicos que me veían. Sugería que exámenes de laboratorio hacerme, les mostraba mi historial y ninguno fue ofensivo por esto, por el contrario, fueron muy receptivos al respecto.

En mi tercera cita, luego de leer el informe y hacerme un par de preguntas el médico que me atendió decidió pasar mi caso de inmediato al Hospital Gineco-Obstetra Isidro Ayora (la Maternidad). Espere 2 dias, me llamaron y ya tenía mi turno asignado para ver a la doctora con la que actualmente sigo en control.

Ya en la Maternidad repetimos laboratorio, me hicieron exámenes más especializados y mi siguiente control incluía también la consulta con un internista. Tras revisarme absolutamente todo la maravillosa conclusión fue que las hormonas en lugar de descontrolar habían regulado mi insulina y el hecho de seguir tomando el medicamento (que no deje nunca por lo "alto" que había sido mi primer resultado de glocusa) era lo que me impedía ganar peso. Luego de eso me mantengo en control con la obstetra cada 3 semanas donde validan que mi ganancia de peso sea regular y me repiten los exámenes de laboratorio cada 2 citas para verificar que todo vaya bien.

En definitiva no tengo mayores quejas del sistema de salud en Ecuador, salvo como explique antes que quizás no estén tan actualizados, pero por lo menos ninguno de los doctores que me han atendido hasta ahora se mostró molesto porque le hiciera una sugerencia.

Apenas voy por la mitad de mi embarazo así que a este artículo probablemente va a seguirle una actualización sobre el tema del parto.

Maternidad y Migración

Elegir un nuevo país para hacer vida, realizar todos los trámites necesarios, hacer maletas y emprender un nuevo destino. Se dice fácil, pero la realidad es que es un paso difícil para cualquier persona ¡Imagínate todo este proceso si eres mamá!

Hay diferentes posibilidad, quizás ya tenias a tu bebé y decidiste migrar por lo cual tomaste consideraciones de acuerdo a esto para que tu decisión no afectará demasiado el desarrollo de tu niño. A algunas el proceso les toma ya estando "afuera" lo que obliga a una preparación diferente si tener un bebé no estaba dentro de los planes iniciales. Sea cual sea el caso, la idea de este blog es crear una comunidad para que como venezolanas podamos apoyarnos en ese camino en el cual no contamos con toda la familia y apoyo que teníamos en nuestro país.

Posibilidades e ideas hay muchas, depende de nosotras y de nuestra organización que logremos ejecutarlas. Espero se animen a ser parte de este proyecto.